viernes, 22 de julio de 2011

Arrivederci

¿Y si esta fuese la última entrada que voy a escribir?
Que palabras me gustaría dejar escritas para que me recodéis leyéndolas.
Ya sé, es un poco macabro este comienzo, pero no nos pongamos en lo peor.
Imaginemos que por una razón maravillosa o simplemente el azar y la vida me lleva a abandonar este blog.
Me encanta pensar que mis pequeños escritos se quedaran perdidos en el universo de Internet hasta que alguien decida eliminarlos.
Será, porque no he plantado un árbol, ni he tenido un hijo y tampoco he escrito un libro, por lo que me hace ilusión pensar que algo creado por mí perdure.
Me gustaría dejar un mensaje de optimismo, poder expresar la pasión por la vida que yo siento, poder sembrar en vuestros corazones una semilla de ilusión y arrancaros una sonrisa.

Releo lo que he escrito y os imagino pensando, "si que se pone intensa por irse de vacaciones", tenéis razón.
Pero es que son tantas las veces que calló mis pensamientos, tantas veces que no expreso lo que siento que me da vértigo pensar que pueda irme sin decirlas.
Siempre postponemos conversaciones, siempre pensamos que ya habrá ocasión de compartir, que en otro momento coincidiremos.
Y no sólo porque puedas desaparecer del mapa, sino porque una palabra que te callas hoy , puede que no tengas mas ocasión de decirla.
Seguro que ya te ha pasado alguna vez y aún así no aprendemos.
Nos callamos lo importante y hablamos con palabras huecas, con las que nos construimos una coraza que nos aisla y protege.
Pero la naturaleza es sabia, por eso protegió nuestro cerebro con el hueso mas grande y fuerte de nuestro cuerpo y dejo el corazón blando latiendo en el centro.
Así se aseguró de que por muy sólidas que nuestra mente haga sus defensas siempre tendremos la capacidad de emocionarnos y romperlas con un sólo gesto.
Felices vacaciones a tod@s en una semanita me tenéis aquí poniéndoos un gintonic.

1 comentario:

Unknown dijo...

Muy bien, por el momento permíteme que este te lo ponga yo, que ya se como te gustan.